Es importante que estimulemos la fase del gateo en la medida de lo posible por lo grandes beneficios que tiene para el desarrollo del niño/a.
BENEFICIOS DEL GATEO:
Desarrolla el sistema vestibular y propioceptivo fomentando la percepción de su cuerpo. y tonificando los músculos. Al soportar el peso de su cuerpo en las manos el niño/a siente la tensión en las articulaciones de las muñecas, hombros, columna, fémures y caderas. Ambos sistemas permiten al bebé comenzar a tomar conciencia de su las partes de su propio cuerpo.
Desarrolla el patrón cruzado: que es la función neurológica que hace posible el desplazamiento corporal en equilibrio del cuerpo humano.
El gateo conecta los hemisferios cerebrales y crea rutas de información importantísimas para la maduración de las diferentes funciones cognitivas. De esta forma, ayuda a la futura lateralización del cerebro,.
Desarrolla la convergencia y ayuda al enfoque al tener que mirar al suelo para colocar la mano o rodilla, el niño/a enfoca los dos ojos en un mismo punto a corta distancia.
Le ayuda a establecer una correcta relación espacio-temporal: el gateo le permite calcular la distancia a la que están los objetos (cerca o lejos). Base para el cálculo de las distancias y para ubicarse en el espacio. Por lo tanto, le ayuda a medir el mundo que le rodea y adaptarse a él.
Desarrolla la coordinación ojo-mano: cuando gatea se establece una distancia entre ojo y mano que en un futuro será la que se establezca para leer y escribir.
Desarrolla la motricidad fina: Al apoyar el peso en sus palmas de las manos el niño/a siente el tacto y la presión, además de mandar información al cerebro de dónde está y de las diferentes sensaciones y texturas que siente.
Le permite ser más autónomo: el desplazamiento por sí mismo le abre un nuevo mundo apasionante por descubrir.